Soy un auténtico enamorado de las ensaladas con Salsa César, actualmente es casi el único tipo que consumo y, casi siempre, de las que vienen ya preparadas listas para comer.
Tengo que reconocer que durante muchos años fui reacio a tomar ensaladas, me gustaba la idea de poder tomar un sano y equilibrado bol de ensalada tal y como hacían familiares y amigos. Quizás gran parte del problema fuese que no puedo soportar el vinagre, ni el olor ni el sabor, en crudo y aunque puedo tomar comidas que lo lleven como el Salmorejo, el simple hecho de aliñar la ensalada con vinagre ya me producía repulsión.
Desde que probé la ensalada César, con su pan frito, sus trocitos de pollo y queso y esa deliciosa Salsa César, me he vuelto un fan incondicional. Como he dicho antes, por su comodidad y porque siempre vamos con prisa, las ensaladas ya preparadas son una solución perfecta pero la salsa que suelen llevar no es demasiado abundante y según la marca, tampoco es que sean deliciosas así que me decidí a preparar mi propia Salsa César casera para cuando la consumo en casa y tengo algo más de tiempo.
Salsa César para ensalada
- 40g mahonesa.
- 1 diente de ajo.
- 1 huevo.
- 50g de queso parmesano rallado.
- 3 anchoas en aceita de oliva.
- 1 cucharada sopera de zumo de limón.
- 1 cucharada sopera de vinagre de vino.
- 70g de aceite de oliva.
- Pimienta negra al gusto.
- Programar unos segundos a velocidad 6 y añadir los dientes de ajo.
- Incorporar el resto de los ingredientes, excepto el aceite y el queso, y programar 20 segundos, velocidad 5.
- Mantener la velocidad e incorporar el aceite poco a poco a través del bocal y dejar unos segundos hasta que coja la consistencia que queremos.
- Echar sobre la ensalada y añadir queso parmesano al gusto.
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