Hay días que no se tiene tiempo para cocinar, así que he pensado comprar en la carnicería albóndigas de pollo y hacerles con una exquisita salsa. Las he congelado en un tupper y así tengo resuelta algunas cenas. Os animo a probarlas porque están muy buenas.
ALBÓNDIGAS DE POLLO EN SALSA DE VINO BLANCO
INGREDIENTES
Para freír las albóndigas:
Harina.
Aceite de oliva.
Para la salsa de vino blanco:
200g de cebolla.
2 dientes de ajo.
50g de aceite de oliva.
4 cucharadas soperas de tomate frito.
100g de vino blanco.
400g de agua.
1 pastilla de caldo de carne.
1 hoja de laurel (opcional).
½ o 1 cucharada cafetera rasa de harina.
ELABORACIÓN
Albóndigas
Pasar las albóndigas por harina y freír en abundante aceite oliva. Sacarlas y colocarlas en el cestillo. Reservar.
Salsa de vino blanco
En el vaso de la Thermomix, echar la cebolla cortada en trozos, los dientes de ajo y el aceite. Sofreír durante 9 minutos, temperatura varoma y velocidad 3 y ½, sin el cubilete.
Añadir el tomate, el vino blanco, el agua, la pastilla de caldo y ½ o 1 cucharadita de harina (según se quiera más o menos espesa). Programar 9 minutos, temperatura varoma y velocidad 4.
Pasado este tiempo, abrir la tapa, colocar el cestillo con las albóndigas dentro del vaso y la hoja de laurel, cerrar y programar otros 15 minutos, temperatura varoma y velocidad 4.
Servir las albóndigas y echar la salsa por encima.
Nota: Este plato se puede acompañar de arroz blanco o de patatas fritas cortadas a cuadraditos.
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